La palabra misericordia tiene su origen en dos palabras del latín: miserere, que significa tener compasión, y cor, que significa corazón. Ser misericordioso es tener un corazón compasivo. La misericordia, junto con el gozo y la paz, son efectos del perdón; es decir, del amor.
Un palpable ejemplo de este tipo de amor misericordioso es el de Dios que siempre está dispuesto a cancelar toda deuda, a olvidar a renovar. Para educarnos en el perdón debemos constantemente recordarlo.
Somos personas que se reunen a orar la coronilla, orar por los enfermos y proveer la necesidades de los que necesitan todo tipo de ayuda. Nuestra mision es conocer mas y mas de la misericordia de Dios y por medio de las obras de Misericordia proveer a las necesidades basicas y llevar el mensaje de amor, consuelo, y Misericordia a los demas.